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Matías Díaz Chávez
Administración Pública
2° Semestre 2014
Universidade Federal do Paraná UFPR, Brasil

Un día como cualquier otro junto con un amigo decidimos postular a la Beca AUGM para poder lograr el intercambio que tanto él como yo anhelábamos (si digo que lo hice con la convicción de que iría a resultar, realmente estaría mintiendo), jamás en la vida pensé que ese sueño y ese anhelo que siempre sentí al entrar a la Carrera lo iba a poder concretar. Fue así como mágicamente en el día del partido inaugural del Mundial de Brasil, recibí esa gran noticia. La felicidad, la emoción pero también el orgullo por el gran paso que estaba logrando, fueron las primeras sensaciones que me embargaron.

El día 31 de Julio tomé mi bolso, mi mochila, mi pasaporte y mi pasaje, y con más dudas que certezas me embarque en esta experiencia. Tenía poca seguridad de cómo iba a vivir, de cómo funcionaba todo en mi nueva universidad, y también una barrera idiomática que ya se hacía notar al llegar al primer aeropuerto, y tener que estar completamente incomunicado por lo poco y nada que manejaba el portugués; me hacían presagiar que esta experiencia no solo académica, iba a representar un gran desafío para mí.

Pasaron los días, pasaron los meses y junto con ello fui creciendo, conociendo, compartiendo y sobre todo encariñándome con cada persona que conocí de los más diversos países y de las más diversas latitudes. Pude crecer en el conocimiento de un nuevo idioma, pude viajar y disfrutar del Atlántico y de sus aguas cálidas, y también pude hacerme de grandes amigos que como se dice acá en Brasil "A gente se ve", o más bien, tendré redes que espero que a pesar de las barreras físicas y de no poder vernos con la costumbre con la que lo hacía en esta ciudad, puedan mantenerse y perdurar en el tiempo.

Curitiba es una ciudad muy linda, muy armónica y cosmopolita; plagada de parques, áreas verdes y sobre todo con un transporte público que pese a no tener metro, no sufre las grandes congestiones de nuestro querido Santiago. Sobre la UFPR que fue la universidad en la cual yo estudié durante estos 4 meses y medio, recalcar la organización y el transporte (INTERCAMPIS) que conectaban cada una de las facultades de la Universidad, el cual tenía una puntualidad increíble. Además reconocer que, a pesar de que somos una región latinoamericana tenemos formas muy distintas, tanto como para cuestiones mínimas como son los horarios para comer, como otras cosas que son más relevantes. Los profesores fueron muy empáticos y con una disposición muy buena ante cualquier duda que yo pudiera plantear en la sala de clases.

En lo académico, pude comprobar que como Universidad en muchos aspectos no tenemos nada que envidiarle a ninguna. Pero esta visión también me hace pensar que, dentro de todo lo positivo que nos brinda nuestra querida USACH, es importante seguir trabajando en los aspectos a mejorar, para que pueda evolucionar en docencia, infraestructura y otros aspectos importantes.

Agradecer a mis padres, a mi hermano y a cada miembro de mi familia, quienes constantemente me enviaron solo buenas vibras en este intercambio. A mis amigos quienes me demostraron y me demuestran cada día el cariño y la dedicación de su amistad y a toda la gente que se preocupó por mí en esos momentos en lo que los sentimientos de los más cercanos están tan lejos, el hecho de que la gente que amas y que siempre ha estado para ti se haga presente es fundamental para asumir el desafió de la mejor manera, sin el apoyo incondicional de ellos, sin su preocupación no sé si mi experiencia sería todo lo potente que fue.

También agradecer la confianza a la señorita Verónica Godoy, a quien constantemente estuve molestando con preguntas, las cuales siempre atendió con la mejor de las intenciones, a la señorita Verónica Yáñez, quien me orientó y me aclaró también muchas de las dudas que tenía antes de iniciar esta travesía. Al profesor Braulio Carimán, quien atendió cada uno de mis mails y cada una de mis consultas antes y durante este intercambio y a mi coordinador de la Universidad Federal de Paraná, Antonio Marcos Severino con quien tuve una muy buena relación y su disposición con cada uno de los intercambistas fue óptima desde todo punto de vista.

Viajar es crecer, viajar es partir de casa y dejar cada una de las comodidades del hogar para recibir, compartir y llenarte de nuevas experiencias y de nuevas sensaciones. Los recuerdos, las enseñanzas que me dejo este viaje las llevaré siempre en mi corazón.

Obrigado Brasil

Até uma próxima, e já voltarei nao tenho dúvida disso

(Gracias Brasil Hasta la próxima, y ya regresaré no tengo dudas de eso)