La actividad se enmarca en los "Café Alumni" que se realizan periódicamente junto al Círculo de Ingenieros Comerciales de la Universidad de Santiago de Chile con el fin de generar instancias para el intercambio de ideas y nuevos aprendizajes para los egresados de la carrera.

news_135_01"Emprender al mínimo costo" fue el nombre de la exposición que realizó el pasado 5 de septiembre el ingeniero comercial de la Universidad de Santiago de Chile, MBA en Administración y Dirección de Empresas de la Universidad Internacional Isabel de Castilla, Carlos Loyola.

El profesional, que cuenta con más de veinte años de una exitosa carrera y experiencia en cargos directivos de áreas comerciales y desarrollo de negocios en empresas de servicios multinacionales, privadas y públicas; estuvo a cargo de la ponencia "Emprender al mínimo costo". En la oportunidad, comenzó contando su experiencia personal y cómo llegó a emprender luego de su gran trayectoria profesional.

Una vez que Carlos Loyola egresó de la USACH, obtiene su primer trabajo: ejecutivo bancario en el Banco BCI, para luego pasar a desempeñar una jefatura en el mismo banco. Buscando nuevas oportunidades, logra importantes cargos gerenciales en distintos bancos del país como los son Banco BBVA, Scotiabank y Santander, así como también en Correos de Chile. También llevó a cabo funciones en el sector público como director regional del Registro Civil; pero por motivos familiares como la enfermedad y posterior fallecimiento de su padre, decidió retirarse del mercado laboral. Fue precisamente en ese momento, cuando vio que volver al mundo laboral a los 48 años era muy difícil y decidió emprender.

"Cuando tomas la decisión deber hacerte algunas preguntas: cuándo, cómo o con qué emprender. Debemos comenzar entonces preguntándonos en qué somos buenos. Yo era bueno para las consultorías financieras, pero durante el 2015, debido a las condiciones económicas, nadie contrataba este tipo de servicios", explicó Loyola a la concurrencia.

Luego, el ingeniero comercial Usach exploró oportunidades de negocios, donde pudiese dar solución a una necesidad. Se enfocó en la Ley de Etiquetados Nutricionales y focalizó ideas para el negocio. "En aquel momento el consumo de Chía comenzó a aumentar y a partir de esto, encontré un producto innovador y nuevo, el jugo de frutas con chía y antioxidantes", puntualizó Loyola, agregando que en ese minuto se planteó tres interrogantes: ¿de dónde sacaba el dinero, cómo y con quién cerrar el negocio y quiénes iban a ser sus clientes y consumidores?

Dentro de la etapa de investigación, Carlos Loyola tuvo que buscar en el mercado alguna empresa que hiciera jugos con chía. Encontró en Perú un exportador de esta semilla, juntó el dinero con la ayuda de un socio y compraron los pasajes para ir a Perú y conversar de negocios, con el objetivo final de convencer a los gerentes de la planta que debían entrar al mercado chileno con su empresa "Mil Corp".

Con esto listo, junto a su socio se pusieron como meta entrar a Cencosud. "Cuando la idea es buena, todo el mundo la compra" agregó Carlos Loyola, señalando que finalmente firmó contrato con Jumbo para la distribución del producto.

Para potenciar las ventas, Carlos buscó contactos televisivos y así es como apareció en Ahora Noticias, mostrando el producto en la planta productora situada en Perú. Esto sin duda aumentó las ventas notablemente, así como también los seguidores en redes sociales. Con ello el producto ya estaba en góndolas del supermercado Jumbo.Todo esto lo logró al mínimo costo de aproximadamente 900 dólares.

Todo iba viento en popa cuando se presentó un problema: la empresa peruana quebró. Con esto debió buscar una solución rápida, puesto que, estaba haciendo quiebre de stock en los supermercados. Viajó a Perú y aprovechó esta oportunidad para reunirse con el competidor directo de la empresa que acababa de quebrar y le propuso ser su representante en Chile, contando con el principal activo de interés para esta nueva empresa con información del mercado que aún no sabía.

Loyola firmó, por lo tanto, contrato con esta nueva empresa, realizó un cambio de marca a una marca propia, cambió de envase de plástico a envase de vidrio, y todo esto con lo que habían logrado ganar anteriormente. Continuaron en Cencosud pero en menos locales debido a que debían ganar nuevamente la credibilidad por tratarse de otra marca, envase, etc. Cuando Carlos y su socio creían que todo iba en ruta, otro problema ocurrió: la empresa peruana fue vendida.

El negocio siguió, pero realizaron una serie de cambios que afectaron a Mil Corp puesto que se produjo un retraso en los embarques de los productos para importarlos a Chile, lo que repercutió negativamente en las ventas de la empresa. A partir de esto, Carlos y su socio decidieron buscar otra oportunidad de negocio, producir en Chile. Encuentran una empresa que acepta producir los jugos con chía para Mil Corp y realizan una alianza comercial para ello. Se logró incluso reducir el precio del producto.

La participación en ruedas de negocios ha sido algo muy enriquecedor para el negocio, puesto que da la posibilidad de dar a conocer más la marca. Entre estas Ruedas de Negocios encontramos Expo Aladi, Expo Alimentaria Perú, entre otras, las cuales se han llevado a cabo en Perú, Bolivia, Colombia.

"Se puede emprender al mínimo costo siempre y cuando se esté enamorado de su emprendimiento. La clave es eliminar las barreras mentales autoimpuestas para poder lograrlo. Los sueños si se cumplen", concluyó el consultor senior en temas de liderazgo.