Johanna Neuner (2012)

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Johanna Neuner
Universidad de Passau
Alemania

¡Hola! Me llamo Johanna, tengo 22 años y soy estudiante de la Universidad de Passau en Alemania. Vine para estudiar Administración Pública durante un semestre en la USACH.

¡Este semestre en la universidad y en general acá en Chile fue súper súper bueno! Fue un placer pasar unos meses con gente tan amable. Lo más especial fue la bienvenida que nos dio la FAE. Fueron 3 en los cuales conocimos a otros extranjeros, tuvimos visitas guiadas en el campo de la USACH, en la Moneda – el Palacio del Presidente chileno – y en el circuito cultural. Por eso quiero agradecer especialmente a Verónica.

La experiencia de la vida universitaria fue muy distinta comparada a la alemana. Acá las clases tienen sólo 20 a 30 personas, al contrario en Alemania, donde hay entre con 100 y 600 personas. Por eso la relación estudiante-profesor es mucho más personal que allá. Además, en general, el sistema universitario de Chile es similar a los colegios en Alemania. Lo que más me gustó fue que tuve la posibilidad de conocer esta manera de estudiar y afortunadamente mis compañeros chilenos siempre fueron amables y dispuestos a ayudar. Muchas gracias.

Cuando llegué fue súper difícil para mi de entender a los chilenos. Sólo había estudiado español durante 2 años en mi universidad y las primeras semanas casi no entendía. El chileno es muy diferente al español castellano, hay muchos modismos, los chilenos se comen muchas letras o cortan palabras. Pero con el tiempo pude entender más y más y ahora me gusta.

Otra cosa que hizo mi tiempo en Chile tan inolvidable, fueron los viajes en este país tan variado. Este país tan largo tiene todos los climas y paisajes distintos. En el sur, la Región de Los Lagos, se parece un poquito al sur de Alemania, hay montañas, lagos maravillosos, volcanes, ríos y casacadas. En el oeste se puede ir al mar en las ciudades Valparaíso y Viña del Mar y al Norte Chico, en los alrededores de La Serena, están los hermosos valles del Elqui y del Encanto.

Finalmente, quiero agradecer a todos que hicieron mi tiempo en Chile inolvidable y que me ayudaron en descubrir una cultura nueva con todas sus facetas: la gente, la comida tan rica, el idioma y la cotidianeidad sudamericana.