Dr. Rodrigo Caputo, analiza la posibilidad de que el rublo pase a ser la moneda de cambio en todos los negocios internacionales de Rusia, en el reportaje del canal DW Español​, filial de la cadena internacional Deutsche Welle para Latinoamérica.

 Desde que Occidente anunció las sanciones contra Rusia, Moscú amenaza con utilizar el rublo en más transacciones comerciales. Todo mientras el dólar está perdiendo influencia global. ¿Puede Rusia gracias a sus importantes exportaciones acabar con la hegemonía histórica del dólar?

 Esta es la interrogante que plantea el reportaje del canal DW Español, filial de la cadena internacional Deutsche Welle para Latinoamérica, en la que entrevista al economista y académico de la Facultad de Administración y Economía de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Rodrigo Caputo.

 Rusia exige comerciar en rublos con el objetivo de crear un nuevo bloque donde el dólar ya no sea la moneda con la que se transen las actividades comerciales, desvinculándose así de occidente y disminuyendo la hegemonía del dólar como moneda reserva de valor.  

 Los países que están en el entorno ruso, que importan petróleo, pueden pensar que los americanos son capaces de congelar las reservas a Rusia en dólares, pero también pueden hacer lo mismo con ellos, y un seguro es acumular más reservas en rublos. Si los clientes aceptan las condiciones, Rusia estará creando una nueva demanda de rublos en el mundo, que daría valor a esta moneda

 Al respecto, el Dr. Caputo indica “para que una moneda sea de uso global, es necesario que ese país tenga presencia en el comercio internacional; Australia, Canadá, China- por ejemplo- pero no es una condición suficiente. Es necesario que exista confianza global en esta moneda, y esta confianza se deriva en cómo las instituciones monetarias fiscales de los países se comportan.  También se deriva de la existencia de mercados financieros profundos, que permitan que esas reservas, o esas monedas, puedan ser invertidas y transadas en los mercados financieros internacionales”.

 Junto con esto, el académico del Departamento de Economía de la FAE Usach, añade que, los mejores clientes de Rusia, los europeos que pagaban más por el crudo y el gas, están reduciendo tan rápido como pueden su dependencia de Rusia. “La demanda de rublos, por lo tanto, no tiene buenas perspectivas. Su cotización no es libre, sino que intervenida para amortiguar el impacto de las sanciones”, concluyó el Dr. Caputo.

 Para ver el reportaje completo, haz CLIC AQUÍ.