En la oportunidad economistas de la unidad académica analizaron la evolución del IMACEC, el PIB, inflación y desempleo. Además, profundizaron en la tendencia que tendrá la Tasa de Política Monetaria y el gasto fiscal, realizando una observación comparativa de la coyuntura macroeconómica de mayo y junio del presente año.

El Departamento de Economía de la Facultad de Administración y Economía de la Universidad de Santiago de Chile realizó una nueva sesión del Conversatorio en Política Económica dando a conocer un profundo análisis macroeconómico del mes de junio de 2023.

En la oportunidad, los ingenieros comerciales en Economía, Sebastián Cárcamo, Cristian Román, Benjamín Oyarce y el Magíster en Economía Financiera, Sebastián Cuellar, liderados por el director del Conversatorio en Política Económica- Víctor Salas- presentaron este completo análisis a la comunidad estudiantil y académica.

Dentro de sus observaciones, y analizando los datos oficiales existentes, determinaron que el IPC se está encaminando hacia su rango meta 2- 4% (fijado por el Banco Central). “Durante el 2023, el IPC ha tendido a ajustarse, lentamente al principio de año y más rápido en junio recién pasado, con una tasa anualizada de 7,6%, lo que ha hecho que los salarios reales estén recuperándose, desde -2,2 en noviembre 2022 a un valor positivo de 1,0 en mayo 2023”, indicaron los economistas, puntualizando que aún algo lejos de los niveles pre pandemia y pre “estallido social”.

Junto con esto, señalaron que la actividad económica del país se está enfriando de manera importante este 2023. Los últimos datos confirman que el IMACEC acumula variaciones interanuales negativas por cuarto mes consecutivo, pasando de -0,27 en febrero a -2,01 en mayo, mientras que el IMACEC no minero no es muy diferente y registra nueve meses de índice anual negativo, con un promedio de - 1,33 mensual. “Esto corrobora el estancamiento que vive nuestra economía”, agregaron.

En el mercado laboral la tasa de desempleo este año subió hasta 8,81% en marzo y se ha establecido en 8,5% en mayo, mostrando resistencia a recuperar sus niveles del año pasado (2022) donde estuvo estable fluctuando alrededor de una tasa promedio de desempleo de 7,79% en los distintos trimestres móviles estimados por el INE.

En relación a la creación de empleo (desestacionalizado) en 2023, se muestra altamente volátil, de 29 mil nuevos empleos en enero sube a 44,8 mil en febrero, cayendo a 19,5 mil y 25,4 en marzo y abril y vuelve a subir a 44,6 en mayo. En cambio, la demanda de trabajo (realizada por las empresas), medida por el índice de avisos laborales, base promedio enero 2015=100, tiene una tendencia claramente declinante, cayendo desde mayo 2022 a abril 2023 en 43%. “A pesar de ello, el mercado muestra resiliencia y avanza lentamente a niveles de ocupación pre pandemia (2019), aunque aún faltan 450.000 empleos por recuperar, calculados comparando la ocupación, estimada sobre la base de la existente en 2019, con la ocupación efectiva, que se ha ido observado en la economía nacional desde diciembre de ese año”, comentaron los economistas de la FAE.

Política monetaria y fiscal

Las expectativas de que el IPC este convergiendo a su rango meta son altas -indicaron los expertos- especialmente después de la caída del IPC de junio 2023 (-0,2%), aunque los precios a este mes aún mantienen niveles elevados, de 7,6% anualizado. “Sobre estos datos se espera que el Banco Central inicie un proceso de rebaja de la Tasa de Política Monetaria (TPM) que, a la fecha, se ubica en 11,25% y que, en la próxima reunión del Consejo (28 de julio) se baje entre 50 ó 75 puntos base.

“Por otro lado, aparentemente a nivel internacional, la inflación también tiende a converger, pero al mismo tiempo persisten factores que tienden a mantener presión sobre los precios sosteniéndolos aún en altos niveles, como el delicado contexto geopolítico internacional (invasión de Rusia a Ucrania, que continúa), las dificultades de recuperación económica en China y el lento estancamiento que vive la economía mundial”, explican.

“Debido a la falta de acuerdo político para aumentar los ingresos fiscales, el gobierno ha seguido una política fiscal ajustada y responsable”, aseguran, puntualizando que el ministro de Hacienda está comprometido a que el nivel de gastos públicos proyectados para este año irá acompañado de un déficit efectivo de 1,9% del PIB y un déficit cíclicamente ajustado, de 2,1% del PIB.