La clase fue realizada por Alberto García Müller en la cual se abordaron conceptos claves sobre la economía social y solidaria, junto con los grandes desafíos que ésta presenta. El evento se enmarcó en la inauguración de una nueva versión del diplomado en Gestión de Cooperativas y Economía Social y Solidaria de CIESCOOP.

news_113_01El Centro Internacional de Economía Social y Cooperativa, (CIESCOOP), organizó el pasado viernes 4 de mayo, la clase magistral "La Economía Social y Solidaria y el Cooperativismo en la realidad latinoamericana y caribeña". Este evento se realizó en el marco de inauguración del diplomado en Gestión de Cooperativas y Economía Social y Solidaria. La instancia contó con la asistencia de Mario Radrigán, director de CIESCOOP; Jaime Bustos, decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Santiago de Chile y Jaime Alcalde, académico de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica de Chile.

Ciescoop ofrece a la comunidad servicios de formación continua, desde desarrollo de capacidades y habilidades sobre economía social, solidaria y cooperativa. Mario Radrigán, director del centro, comentó a los asistentes, la importancia de desarrollar una progresión en la línea de docencia.

"Nos parece fundamental ir desde el nivel preescolar hasta el doctorado, puesto que los estudiantes a medida que avanzan en el sistema educativo van quedando con una impronta que es difícil de desaprender" puntualizó Radrigán a la audiencia.

El encargado de dictar la charla fue Alberto García Müller, director Científico de la Asociación Iberoamericana de Derecho Cooperativo, Mutual y de la Economía Social y Solidaria. En ésta, el académico expuso sobre el concepto de economía social y solidaria, sus valores y principios, componentes y las diferentes concepciones.

Además, se refirió al cooperativismo como agente esencial, la situación actual del sector, los marcos legales y los retos que enfrenta en la actualidad. Respecto a lo último, el experto remarcó la importancia de mantener o recuperar la identidad haciendo obligatorio el balance social cooperativo.

Junto con eso, destacó el valor de poner énfasis en la producción y prestación de bienes y servicios "preferentes" en actividades productivas, la comercialización de productos campesinos, la creación de mercados locales y la prestación de servicios públicos, entre otros fueron los retos mencionados por García Müller.