Fachhochschule Wiesbaden, Alemania
Joaquín Muñoz
Administración Pública
La posibilidad de vivir de nuevas experiencias es una de las grandes fuentes de cambios y mejoramiento en la medida que damos un buen curso a nuestras acciones a través metas cada vez más exigentes y que procuren un aporte o impactos positivos en nuestras relaciones cotidianas.
Si bien es cierto los beneficios que de esto se obtiene son enormes, es necesario hacer algunos alcances para tener en cuenta. Entendiendo que nos desenvolvemos en un contexto de alta interdependencia en las relaciones, un proceso de incentivo y estímulo que motiven a que los alumnos puedan postular y acceder a experiencias internacionales debe estar respaldado por una gestión conciente y responsable de las autoridades académicas y administrativas de la universidad y nuestra facultad, la FAE, pues son ellos quienes deben velar por el otorgamiento de beneficios y facilidades para todos los estudiantes. La vida del estudiante de la Usach ya es bastante difícil, y si bien es cierto nunca se han dejado de enfrentar los problemas propios de ello, se requiere de ofertas que puedan ser complementadas con el esfuerzo de todos los involucrados, principalmente estudiantes, departamentos de apoyo para estas actividades y autoridades universitarias en general. Las oportunidades que se brindan a los estudiantes deben ser ofrecidas con la convicción de que esto será parte de un proceso inserto en círculo virtuoso que se preocupe de apoyarlos. En conclusión, la experiencia de vivir y estudiar en el extranjero importa un beneficio inmedible a los estudiantes en distintos aspectos de su vida. Sin embargo, se torna imprescindible contar con un apoyo institucional que otorgue respaldo y una cierta protección para los educandos en el proceso educacional, pues entregar estas herramientas, que integran en gran medida tan importante proceso, son de responsabilidad compartida.
El llamado, en general, es a informarse sobre las opciones para salir a estudiar al extranjero y atreverse a tomar el desafío. Tenemos las mismas capacidades que cualquier estudiante del mundo, no somos menos y debemos superar los paradigmas sociales que nos impiden ampliar nuestros horizontes. Con trabajo, dedicación y voluntad todo es posible.