Para el académico del Departamento de Gestión y Políticas Públicas de nuestra Universidad, sociólogo Alberto Mayol, en Chile se han instalado distintos mitos conservadores que afectan al país, referidos a economía, seguridad y sociedad, y que llevan a que se crea en hechos que no son o se inventan soluciones para situaciones que no existen. Ejemplifica con tres casos: quienes aseguran que la delincuencia se resuelve con más policía o más represión; los que dicen que las reformas sociales pueden afectar el crecimiento económico, y los que aseguran que la corrupción se relaciona con la caída de la economía nacional.
Para el académico del Departamento de Gestión y Políticas Públicas de nuestra Universidad, sociólogo Alberto Mayol, en Chile se han instalado distintos mitos conservadores que afectan al país, referidos a economía, seguridad y sociedad, y que llevan a que se crea en hechos que no son o se inventan soluciones para situaciones que no existen. Ejemplifica con tres casos: quienes aseguran que la delincuencia se resuelve con más policía o más represión; los que dicen que las reformas sociales pueden afectar el crecimiento económico, y los que aseguran que la corrupción se relaciona con la caída de la economía nacional.
El país está viviendo una caída de la inversión y una desaceleración económica, lo que genera que los ciudadanos, en general, tengan una proyección pesimista respecto a la percepción de confianza en la economía chilena.
Ante esto, el académico del Departamento de Gestión y Políticas Públicas de nuestra Universidad, sociólogo Alberto Mayol, manifiesta que "el error de principio que tienen las personas es pensar que la confianza mueve la economía, porque tiene que ver con antecedentes más sólidos, con hechos estructurales, como por ejemplo que bajó el precio del cobre".
"La ciudadanía sabe que la economía se está sintiendo, la mayor parte de ellos le está adjudicando la culpa al gobierno, y la verdad que no tiene mucho que ver", agrega.
Recalca que "aquí se ha instalado distintos mitos graves sobre la economía, la seguridad, la sociedad, en fin, una serie de cosas que se pueden definir como mitos conservadores. Tenemos que ver cada uno por separado y son un conjunto de temas que son mentiras, donde el gobierno no ha sabido manejar y algunas veces ha permitido el fomento de esas ideas".
Entre estos mitos, el sociólogo resalta que están los "que hablan sobre seguridad, en que la delincuencia se resuelven con más policía o más represión, donde en Chile hay un problema con la puerta giratoria con la justicia, y la verdad es que los fenómenos delictuales poseen antecedentes más complejos que tienen que ver más con la desigualdad. Otro, dice relación con el de las reformas sociales, señalando que pueden afectar el crecimiento económico, así como que la crisis de corrupción tiene algo que ver con la caída del auge de la economía chilena".
"Creer que la confianza en la economía es un indicador relevante, para lo único que afecta es al consumo. Como la economía de Chile está basado en la compra para que las personas se endeuden, obviamente que se puede pegar un golpe respecto a esto", argumenta.
Por lo anterior, destaca que "si se cambia la dinámica de mover la economía por consumo y deuda sería importante, incluso puede ser hasta un favor para nuestro sistema económico obligarnos hacer algo que sea distinto".
"Lo único que genera esto es que se piense que no se debe hacer caso a lo social, sino que a lo político, porque lo social está plagado de errores, delincuencia, desorden, terrorismo, entre otras cosas", remarca.
Por último, manifiesta que dichos mitos "están sosteniendo la gobernabilidad, porque el Ejecutivo es parte del fomento de estos mitos. Entonces, estos no los afectan, sino que al país. Hace que la gente crea cosas que no son, y se inventan soluciones para cosas que no existen o se verían de otra manera en el caso que estuvieran".
Por Tomás Parker, tomado de UdeSantiago AL DÍA