La Unidad de Relaciones Internacionales se encarga de orientar a las y los alumnas/os, aconsejarles y estimularles a que realicen intercambios académicos dentro y fuera de Chile, y para esto pone a disposición este beneficio monetario.
La Unidad de Relaciones Internacionales busca orientar, aconsejar y estimular a los alumnos con el fin de que realicen intercambios dentro y fuera del país, se encarga de establecer contactos entre las diversas universidades y organizaciones internacionales y mantener una comunicación activa con los coordinadores de intercambios de otros países.
Su objetivo principal de la unidad, es de gestionar becas e intercambios, además de fortalecer los convenios de doble grado con universidades de todo el mundo, creando así la oportunidad de realizar estudios de pregrado y postgrados en universidades extranjeras, pudiendo incorporar experiencias internacionales en su formación académica.
Con el fin de promover la internacionalización, la FAE decide implementar un beneficio que sirve de complemento al que la universidad ya otorga.
“Sabemos que no todos nuestras/os estudiantes, necesariamente, tienen recursos para poder realizar una actividad de este tipo, y por lo mismo es que la universidad y la facultad, hacen los esfuerzos para que las y los alumnas/os que tengan ganas y que se lo merezcan, puedan realizar la movilidad, entregándoles ciertos recursos”, señala Felipe González, secretario académico de la FAE.
La FAE está entregando, cada semestre, alrededor de $1.300.000 por estudiante que ha sido seleccionada/o para realizar movilidad. “Creemos que esa cifra es adecuada y que sí representa un apoyo para los estudiantes. Entendemos que puede que -eventualmente -no supla todos los recursos que se necesitan, pero representa una ayuda importante para ellos”, agrega el secretario académico.
Por su parte, Verónica Godoy, coordinadora de Relaciones Internacionales de la FAE comenta que “este beneficio se empezó a otorgar desde el semestre pasado, donde se entregaron cuatro aportes. Para que sea un monto considerable, y para que sea más significativo, nosotros usamos ciertos criterios para poder asignarlos”.
Dentro de los criterios que comenta Godoy, se consideran cinco elementos. El primero son las notas, que tienen una ponderación del 40%, las reprobaciones un 10%, el voluntariado o trabajo un 20%, los estudios en inglés un 15%, y las ayudantías tienen una ponderación del 15%. “Por ejemplo, si no tienen ninguna reprobación tienen el 100%, si tiene una o dos reprobaciones tiene un 80%, y si tiene tres o más, un 60%. En el caso de los voluntariados, si tiene más de dos años ya tiene un 100%”, agrega la coordinadora de Relaciones Internacionales.
“Los beneficios de hacer un intercambio son principalmente la experiencia de ir a otra parte del mundo y de visualizar cómo son las cosas en otra parte, en otra universidad, otro país y otro destino. Lo que más se logra es un crecimiento de carácter personal, en muchos casos, una experiencia de intercambio te hace ver que las cosas no son tan diferentes desde la perspectiva académica y permite que se observe el mundo de una manera muy distinta. Los estudiantes que han regresado de un intercambio, vuelven distintos, con una visión personal muy diferente de cuando salieron. Todos terminan agradecidos de la oportunidad, muy satisfechos y recomiendan vivir esta experiencia”, concluye Felipe González.