Francisco Castañeda

Economista Usach

La propuesta de Lavín de crear 50 Liceos de Excelencia debería ser complementada con otras medidas de reforzamiento educacional, para no caer en la crítica de que esta medida producirá más segregación socio-estudiantil.

Le propongo al Ministro Lavín reforzar adicionalmente toda la educación técnica-profesional-industrial y comercial. Las familias de ingresos medio-bajos, anticipando el alto costo de la posterior educación superior de sus hijos, envían sus hijos a estos colegios para que los doten de herramientas que les permitirán insertarse tempranamente en el mundo laboral. Por esta poderosa razón, a estos liceos hay que modernizarlos y dotarlos con buenos laboratorios, tecnologías mediales, herramientas, talleres, así como también es necesario actualizar a profesores en el nuevo esquema. Suplementos financieros para reforzar la infraestructura existente son imprescindibles. También la asociación de estos liceos con empresas pequeñas y medianas en el ámbito urbano-rural contribuiría a mejorar: i) la preparación profesional, y ii) el desempeño de empresas por contar con una fuerza laboral capacitada.

Existen pocas experiencias exitosas en este ámbito, ¿por qué no replicarlas?.

Jóvenes que pertenecen a familias vulnerables son alumnos de estos establecimientos. ¿Porqué entonces no demostrar la direccionalidad de las políticas públicas en forma clara y nítida?. No es un tema de restricción de recursos como dijo un Diputado; en USA rentan menos que el 5% los fondos soberanos, mientras la rentabilidad social de la educación al menos la dobla. Claro esta que esta medida es menos mediática.