El pasado 7 de octubre en el Centro de Extensión de la Universidad Católica, Yorka Nuñez junto con 4 alumnos más de la Usach recibieron la Beca de Movilidad Internacional que entrega el Banco Santander.
El pasado 7 de octubre en el Centro de Extensión de la Universidad Católica, Yorka Nuñez junto con 4 alumnos más de la Usach recibieron la Beca de Movilidad Internacional que entrega el Banco Santander.
Cinco fueron los alumnos de la Universidad de Santiago de Chile que fueron seleccionados entre 60 postulantes para recibir la beca de movilidad internacional, que consiste en cinco mil dólares, para financiar su estadía y colegiatura durante un semestre académico del 2014 en una de las más de 100 instituciones internacionales con convenios de movilidad vigentes con nuestra Universidad.
Los estudiantes pertenecientes a las carreras de Ingeniería Civil en Minas, Medicina, Arquitectura, Psicología y Administración Pública se mostraron contentos y entusiasmados por el apoyo que recibieron de sus familias, amigos, de la entidad bancaria y de esta Corporación, para cumplir el sueño de estudiar en el extranjero.
En el caso de Yorka Nuñez recibió con total sorpresa el llamado en que le notificaron que era una de los cinco estudiantes ganadores de la beca de movilidad internacional, que año a año entrega Santander Universidades. "Fue una alegría enorme. Nunca pensé que me iba a ganar la beca. Es una gran oportunidad. A veces son otras personas las que creen en uno, incluso más que uno mismo".
Igual de contentos estaban sus padres, ya que en la familia de Yorka, ella representa a la primera generación con acceso a estudios superiores. "Mi mamá estaba muy orgullosa y emocionada. Soy de Pirque y donde vivo, generalmente la gente llega sólo hasta la Educación Media. Entonces, que yo haya ingresado a la Universidad y que ahora haya ganado una beca para estudiar fuera de Chile, es un orgullo para la gente de mi localidad, están todos muy contentos", dijo.
Por su parte la estudiante evaluó los beneficios y costos económicos y optó por la Universidad Estadual Paulista de Brasil y aunque no habla portugués, cuenta con cuatro meses para practicar, por lo que ya se inscribió en un curso básico del idioma en la Universidad.