Uno de los resultados de esta indagación, que consideró a cerca de cien compañías de estos rubros, revela que los empleadores valoran el compromiso, la responsabilidad y la puntualidad de las personas pertenecientes a este grupo etario. Estas características los diferencian de personas más jóvenes en áreas como atención de público o servicio al cliente.
Uno de los resultados de esta indagación, que consideró a cerca de cien compañías de estos rubros, revela que los empleadores valoran el compromiso, la responsabilidad y la puntualidad de las personas pertenecientes a este grupo etario. Estas características los diferencian de personas más jóvenes en áreas como atención de público o servicio al cliente.
Nuestro país está envejeciendo. Según datos entregados por la Encuesta Casen del 2013, en la actualidad los adultos mayores representan un 16,7% y las proyecciones indican que el año 2023 la cantidad de adultos mayores y niños quedará igualada (Celade, 2013).
Es por este motivo que la Facultad de Administración y Economía en conjunto con Sence y la Otic del Comercio, Servicios y Turismo de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), desarrolló el estudio 'Mercado laboral, adulto mayor y personas próximas a jubilar en Chile: línea base y recomendaciones de diseño programático para comercio (retail), servicios y turismo con foco en mujeres'.
En la presentación de los resultados del estudio estuvo presente el ministro de Desarrollo Social, Marcos Barraza, quién indicó que estos resultados salen a la luz en un momento importante, donde se ha repensado la seguridad social y se ha pensado en un nuevo sistema de pensiones. "Uno de los principales hallazgos que arroja este estudio, es la confirmación de ambivalencia, pues el trabajo en adultos mayores ya no se debe sólo a una necesidad económica, sino que el mantenerse activos y auto realizados cobra una relevante importancia", dijo Barraza.
El ministro además se refirió al dato arrojado por la investigación que indica que el 96% de las empresas del comercio, servicios y turismo mostraron interés de contratar a adultos mayores. "Esto ayuda fuertemente a modificar los prejuicios de los clientes de los sectores económicos", agregó la autoridad.
Con respecto a esa cifra, Cristián Hernández, investigador de la FAE y uno de los autores del estudio, argumenta que "los empleadores de estas compañías perciben que el desempeño laboral de los adultos mayores es mejor que el de personas más jóvenes en ámbitos como atención de público o servicio al cliente".
El estudio revela, además, que las empresas atribuyen a este segmento habilidades y competencias como compromiso, responsabilidad, puntualidad, orientación a la excelencia y optimismo, además de un bajo nivel de ausentismo.
Sin embargo, Hernández advierte que el 90% de los puestos de trabajo disponibles para adultos mayores son de mediana o baja calificación. "Creemos que este es un desafío relevante que debemos superar como país, pues este segmento está perfectamente capacitado para desempeñar tareas más complejas y que además sean estimulantes en lo profesional", afirma.
Por su parte, Ricardo Mewes, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, indica que han comprobado por experiencia, que los adultos mayores contratados en las empresas asociados a su institución, han demostrado responsabilidad y liderazgo en los equipos que forman. "Creemos que, como país, debemos desarrollar políticas públicas que los incorporen, considerando la mayor esperanza de vida y su aporte a la productividad y el crecimiento nacional", añade.
Un problema que detecta el estudio son las pocas ofertas de trabajo para este segmento. Mientras los empleadores declaran enfrentar dificultades para encontrar postulantes de mayor edad, estos últimos declaran que desconocen las herramientas para acceder a las plazas que se encuentran disponibles. Lo señalado provoca desaliento, lo que repercute directamente en un mayor nivel de inactividad.
En ese sentido, el informe plantea la necesidad de fortalecer instancias de "intermediación laboral" específicas para las personas mayores, acercando a los interesados a las ofertas laborales dirigidas a este sector.
"Las personas mayores tienen derecho a elegir, y en ese sentido, si se encuentran en condiciones físicas y mentales de seguir trabajando, como sociedad debemos hacernos cargo de generar las condiciones apropiadas para que esto ocurra", señala el director nacional del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), Rubén Valenzuela.
El estudio realizado por investigadores de la FAE, informa que un 66% de las personas mayores que trabaja seguiría haciéndolo, incluso si no tuviera la necesidad económica de hacerlo. Este dato es relevante, pues contradice los resultados de la Tercera Encuesta Nacional de Calidad de Vida en la Vejez, realizada en 2013, donde un 64% de los encuestados declaró que su decisión de trabajar obedecía a una necesidad económica.
Por eso, puntualiza que entre los factores fundamentales para analizar correctamente las motivaciones que llevan a trabajar a las personas mayores, se debe considerar su derecho a ser reconocidas como personas autónomas y capaces de decidir libremente si hacerlo o no.