La instancia reunió a destacados exponentes nacionales y extranjeros, especialistas en políticas públicas, empresas públicas, gobiernos corporativos, políticas económicas y jurídicas, quienes e sus distintas ponencias, analizaron los nuevos enfoques para la innovación de las instituciones públicas.
La instancia reunió a destacados exponentes nacionales y extranjeros, especialistas en políticas públicas , empresas públicas, gobiernos corporativos, políticas económicas y jurídicas, quienes e sus distintas ponencias, analizaron los nuevos enfoques para la innovación de las instituciones públicas.
El Centro de Políticas para el Desarrollo de la Facultad de Administración y Economía de la USACH realizó el 6 de septiembre pasado el "Segundo Seminario Internacional sobre Instituciones y Desarrollo. Nuevos enfoques para la innovación", instancia que contó con el apoyo del Proyecto Fondecyt de Iniciación número 11140348.
La charla inaugural la realizó el director del Departamento de Gestión y Políticas Públicas y director del Centro de Políticas para el Desarrollo, Gonzalo Martner, quién se refirió a la innovación en la gestión pública y gobernabilidad del desarrollo, indicando que ésta debe adaptarse a circunstancias que van apareciendo y que ante esto, se debe innovar. "Los desafíos actuales en la gestión pública es generar políticas en torno al fin del ciclo abierto de 2004 en América Latina en el que se produce el boom de los precios de las materias primas, lo que ha llevado a una disminución de los ingresos fiscales", agrega.
A juicio de Martner la economía influye en la capacidad de generar política. "Se vive una restricción de las capacidades financieras por mantener déficit fiscales prolongados si el costo es bajo. Pero esa situación tiene límite en el tiempo. Hay países que ya han iniciado ajustes fiscales a la baja , como el caso de Brasil, lo que tendrá efectos macroeconómicos con tendencia a recesiones en esta materia", puntualizó el director del Centro de Políticas para el Desarrollo de la FAE.
Junto a esto, Gonzalo Martner expresó que "cuando los países tienen períodos de más holgura fiscal, pueden incrementar los gastos que logran más popularidad y se descuida la inversión de infraestructura, investigación y desarrollo. "Ese es el momento de construir coaliciones para una interacción entre el Ejecutivo y el parlamento, lo que es un desafío de gran envergadura", finalizó.
Por su parte, Alfredo Remo Lazzaretti, académico de la Universidad Nacional de Mar del Plata, abordó el tema de la gobernabilidad del desarrollo, destacando que en las sociedades latinoamericanas la política ha tenido una pérdida de valoración de sus representantes. "Éstos abusan de sus posiciones en beneficio propio y el Estado tampoco da respuestas a los ciudadanos, por este motivo también perdió credibilidad", indicó Remo.
A esto, agregó firmemente que hay que avanzar en la inversión y redefinición del sistema fiscal y discutir impuestos que normen la renta y la propiedad, lo que es esencial para la región. "Debemos buscar una mejor manera de régimen presidencialista, disminuyendo aspectos negativos, como por ejemplo, la forma en la que los parlamentos controlan a los presidentes. Tenemos que garantizar un nuevo equilibrio entre Estado , actores sociales y Economía. Se debe comenzar a hablar de pactos sociales con los objetivos de reducir la desigualdad y crear una sociedad más inclusiva ara los ciudadanos", finalizó.
Javier Ozollo, de la Universidad Nacional de Cuyo, expresó por su parte, la importancia de armonizar en un proceso geopolítico de mercados más amplios que permita atenuar las variaciones abruptas de las materias primas. Junto a esto, señaló que las instituciones se han visto incapacitadas para manejar a los sectores que concentran la economía y que tienen intereses en grupos económicos como los medios de comunicación, el sistema financiero y bancario. "Los movimientos populares que convergen en un liderazgo carismático, como por ejemplo el chavismo, tienen un problema esencial basado en la forma en la que se forman las coaliciones de gobierno para saber si la política puede hacerse cargo de los problemas", indicó Ozollo.
Estado, Instituciones y equidad
La segunda conferencia estuvo a cargo de la ex ministra coordinadora de Política Económica de Ecuador, Jeannette Sánchez, quién se refirió al Estado, las instituciones y la equidad como nuevos paradigmas.
Sánchez explicó que la falta de relaciones sistemáticas, complementarias y solidarias entre distintos actores plurales de la economía, como la economía pública, la empresarial, la popular solidaria y la no solidaria. "La característica negativa de la región de Latino América, es que su sector capitalista apuesta poco en sus propios países, con lo que el desempleo comienza a crecer. Sin embargo, la desigualdad disminuye", dijo la ex ministra ecuatoriana.
Las potencialidades de esta situación, recalcó Sánchez, es el avance social y educativo, la inversión en infraestructura para el desarrollo. "Hasta ahora las democracias en América Latina han sido estables, pero con lo ocurrido en Brasil con la destitución de la presidenta Dilma Rousseff, se demuestra que esto también se va agotando", expresó.
La ex ministra de política económica de Ecuador se refirió al modelo realizado en su país, donde se impulsó un sistema económico social, solidario y sustentable. "La idea del fin de la política pública y desarrollo desde el buen vivir es para construir un sistema económico más social y solidario, que permita en buen vivir, la armonía interna, la armonía con la comunidad y entre comunidades y la armonía con la naturaleza", argumentó Sánchez.
Pero, ¿cómo esto se plasmó en políticas? Se preguntó Sánchez, respondiendo que se logró haciendo un cambio en la matriz productiva, con políticas horizontales y sectoriales. "Se realizaron políticas de acuerdo a activos productivos, políticas sectoriales que buscan bajar las brechas de productividad, y políticas activas como fortalecimiento de la economía hacia la solidaria. El principal desafío que tenemos ahora es cómo hacer para no perder lo avanzado y poder sostenerse en un escenario más austero", finalizó Sánchez.
Patricio Narodowski, de la Universidad Nacional de la Plata, comentó la ponencia de la ex ministra de política económica de Ecuador indicando que el problema fundamental es que además de haber diferencias entre productividades hay una superposición de actores que corresponden a modos de producción anteriores. "Cuando se politizan los mercados y la gestión pública, deteriora los mercados que deben estar regulados por instituciones", agregando que hay que trabajar en la reconstrucción de la institucionalidad de los mercados entre renta y producción.
El comentario jurídico político fue dado por Carlos Morales, del Instituto de Derechos Humanos Bartolomé de las Casas de la Universidad Carlos III de Madrid, quién explicó que existe una carencia de liderazgo político importante. "En España, la derecha y la izquierda no encuentran manera de diferenciarse porque se preocupan de las mismas políticas y temas sociales, simplemente se diferencias por los temas valóricos", argumentó Morales.
El académico del Instituto de Derechos Humanos Bartolomé de las Casas agregó, además que en España las políticas públicas y los cambios económicos no pueden hacer mucho "La configuración del Estado marca lo que se puede hacer. Las políticas sociales se definen en los presupuestos generales del Estado y hay una marca muy definida que es muy difícil de cambiar", finalizó.
Estado empresario en América Latina
En el final de este Segundo Seminario Internacional sobre instituciones y Desarrollo realizado en la Facultad de Administración y Economía de la USACH se discutió sobre el Estado Empresario en América Latina, su pasado, presente y futuro. Javier Vidal, de la Universidad de Alicante, hizo un análisis de la empresa pública española, refiriéndose a la tradición mercantilista del siglo XVIII.
Fue en este período donde se realizaron transformaciones en la idea de empresa pública. Los Estados tienen en cuenta que deben tener manejo de una mínima estructura o que el Estado debe tener una presencia más importante. "Con la dictadura de Franco surge en España un aislamiento que dio vida al Instituto Nacional de Industrias, que se encargó del desarrollo industrial público para dar estabilidad comercial en este período. Pero cuando termina esa etapa, que coincide con la consolidación de la comunidad económica europea, había que prepararse para una nueva estructura, desmantelando las empresas públicas. Se llevó a cabo la privatización pero con condiciones rigurosas en cuanto al tiempo y mecanismos para hacerlo", relató Vidal.
De esta forma se hizo de las empresas públicas grandes jugadores en el mercado internacional con compañías como Repsol y Movistar. "Hay una idea de gestión de la empresa pública en transición hacia el máximo posible de rentabilidad, por eso se sale a los mercados internacionales, con la idea de aumentar el tamaño haciendo fusiones con los mercados de América Latina", indicó Javier Vidal, agregando que con esto, surgió un nuevo tipo de empresa pública, orientada a los mercados, competitiva, eficiente y corporativizada.
Esta ponencia fue comentada por Guillermo Guajardo, de la Universidad Nacional Autónoma de México, quién se refirió a la experiencia de México, Brasil y Chile. "Hay trece empresas públicas en el mundo que controlan ¾ partes de las empresas del petróleo", indicando que la constitución construye la propiedad privada mexicana y en la década del 30 el Estado se queda con grandes activos que son empresas de escalas que cubren territorialmente el Estado mexicano. "Ya para 1981 mil 100 empresas estaban en manos del Estado. Estas empresas se venden con contratos laborales y comienzan a privatizarse, pero el Estado no ha perdido el control económico de ciertos sectores económicos", finalizó.
Federico Lustosa da Costa, de la Universidad Federal Fluminense de Brasil, fue otro de los comentaristas de esta ponencia, explicó la realidad de Brasil, indicando las formas de intervención del Estado en los mercados, como reguladores, fomentando la producción, entregando infraestructura y realizando una producción directa. "Las principales razones para intervenir fueron los monopolios naturales, los mercados incompletos, los ciclos de negocios, las externalidades, los fallos de información y los bienes públicos", dijo Lustosa, agregando que el Estado prestó dinero a muchas empresas y como éstas no pagaron, pasaron finalmente a manos del Estado.
Finalmente, Bernardita Escobar, presidenta de Empresas Públicas, organismo anidado en la CORFO en Chile, explicando que a finales de los años 90 la CORFO crea el Sistema de Administración de Empresas, que opera independiente de la corporación y le delega la supervisión de las empresas y en el 2001 se crea el SEP donde se agregan muchas más empresas. "El Estado ejerce nuevos roles respecto de sus propias empresas, el SEP ejerce el rol de dueño, pero el Estado regula y fiscaliza", comentó Escobar.
Junto a esto, Bernardita Escobar indicó que el SEP otorga autonomía a cada una de las empresas y entregan las directrices de metas, entregando un código SEP que es una guía de buenas prácticas de las empresas de gobierno corporativo y evaluando el cumplimiento de éstas.