Agentes estiman que lo anterior, sumado a las alzas de los carburantes de las últimas semanas, llevarían a que el IPC de noviembre escale en hasta 0,2%.
Con
el alza cercana a $18 por litro que experimentarán hoy las bencinas,
éstas sumarán un avance en torno a los $40 en las últimas tres
semanas. Más aún, según advierte Jorge Hermann, economista de Fontaine
& Paul, el jueves próximo se elevarían unos $12 y, al subsiguiente,
otros $5. Así, el fenómeno se convertiría en un agente de presión que
podría evitar que la inflación de noviembre tenga un nuevo registro con
signo negativo.
El analista agrega que "se deberían mantener los
precios altos, lo que sumado a la evolución del kerosene y del gas
licuado, daría que la incidencia (del grupo combustibles) sería entre
0,2% y 0,3%; situación que, más o menos, compensa la baja de las
tarifas eléctricas (...) Es bastante probable que el IPC de este mes, y
al contrario de lo que está previendo el mercado, sea positivo y que se
sitúe entre 0% y 0,1%".
Guillermo Pattillo, de la Usach, proyecta
un 0,2% para el indicador de noviembre, en parte por la subida descrita
y también por la de alimentos. En perspectiva, dice que el "petróleo
tiene una suave tendencia al alza en 2010, pero no lo vemos como una
presión relevante como la que tuvimos hace un ejercicio". Añade que "lo
que sí podríamos observar son oscilaciones; los ascensos pueden
revertirse más adelante".
Y aunque Alejandro Puente, del BBVA,
vaticina una contracción de 0,1% para la variable de análisis este mes,
manifiesta que "estamos pasando de una coyuntura de mucha volatilidad a
una donde vamos a empezar a ver inflaciones moderadamente" sobre 0%.
Para
Cristián Gardeweg, de Celfin Capital, el incremento de los carburantes
ha sido "sólo parcialmente compensado por la caída del tipo de cambio".
Con todo, afirma que "mantenemos nuestras expectativas de variación del
IPC de 0% para octubre, -0,1% para noviembre e igual tasa para
diciembre".
MANEJO DEL FONDO
Por otro lado, el Fondo de
Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepco) y la libre
facultad de la autoridad para modificar su funcionamiento recobran
importancia, sobre todo si se toma en cuenta que el país está a poco
más de un mes de asistir a las urnas para elegir un nuevo Presidente.
En ese plano, Hermann sostiene que "dada la discrecionalidad del manejo
del instrumento y los aumentos recientes de la bencina, es posible que
lo manipulen para dar subsidios; por ejemplo, ampliando de 26 a 52 las
semanas que se consideran en su promedio histórico. Si esto ocurre, los
valores suben, pero en una cantidad menor".
Publicado en Diario Estrategia