Sea quien fuere el ganador de las elecciones presidenciales chilenas hoy, el futuro Gobierno mantendrá el sistema que combina la economía de mercado y la protección social.

Este modelo económico, que le ha dado al vecino país estabilidad social y prosperidad económica, es compartido en lo esencial, tanto por el candidato de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, como por el de la Concertación, Eduardo Frei, aseguran los expertos.

Cuando terminó la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), la derecha chilena perdió en las urnas, pero sus ideas económicas se impusieron en la práctica. Ahora, después de dos décadas de gobierno de la Concertación, el modelo social está consolidado y ningún postulante lo pone en cuestión.

El economista y docente de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Santiago de Chile, Francisco Castañeda, recordó que durante los años 90 "la Concertación se apropió del discurso proempresarial de la derecha, pero le agregó una creciente dosis de protección social".

Las reservas acumuladas en fondos soberanos gracias a los elevados precios del cobre permitieron que la administración de la socialista Michelle Bachelet financiara el gasto fiscal durante la crisis de 2009 y mantuviera el esquema de protección social a largo plazo. El otorgamiento de la pensión básica universal es, en opinión de los expertos, la decisión política más acertada de la Mandataria, quien cuenta con un respaldo superior al 80 por ciento en suelo chileno y deja a su sucesor 20.000 millones de dólares en fondos soberanos y activos financieros.

Castañeda recordó que el bloque político que apoya a Piñera se resistió, al inicio, a una pensión universal, alegando que "desincentivaría el ahorro, disminuiría la inversión y fomentaría la flojera".

Al respecto, el director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), José Jara, expresó que "tanto Frei como Piñera manifestaron que están a

favor de continuar con el modelo de protección social y darle cierta continuidad a lo hecho por la presidenta Bachelet".

Jara comentó que ni Piñera ni la derecha, por lo general neoliberal, se han planteado un retroceso en ese sentido. Muchas de las medidas están garantizadas por ley y tienen asignados recursos presupuestarios. "El modelo de mercado continuará. El futuro Gobierno se diferenciará por el énfasis que dé a determinadas políticas sociales".

Para poner en práctica esas medidas, al nuevo Presidente le espera un panorama más apacible que el que tuvo Bachelet en su primera etapa, asediada por protestas estudiantiles y el caos del nuevo sistema de transporte.

Según el pronóstico del Banco Central de ese país, la economía chilena crecerá este año entre un 4,5 y un 5,5 por ciento, frente a la caída del 1,9 por ciento experimentada el año 2009.

El Director de la Flacso afirmó que la prioridad de Piñera es la creación de un millón de puestos de trabajo en los próximos cuatro años, la de Frei (700.000 empleos) tiene que ver más con educación, innovación y los derechos laborales.

Futuro Gobierno se diferenciará por el énfasis a políticas sociales.

Un local de votaciones fue apedreado

Un apedreo a un local de votación, que llevó a un soldado a realizar dos disparos al aire, es por el momento el único incidente que se ha registrado en Chile, que vivió ayer una tranquila jornada previa a las elecciones presidenciales de este domingo. Según informó la Radio Biobío, el hecho ocurrió en Concepción, a 515 kilómetros al sur de Santiago. El uniformado se hallaba custodiando el colegio electoral, dado que desde el viernes todos los lugares de votación se encuentran bajo el control de las fuerzas armadas y carabineros (policía militarizada).

"Éste es un incidente menor, lamentable (...). El Ejército hizo dos disparos disuasivos y fue un incidente que no pasó a mayores", afirmó el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, quien supervisó ayer varios locales de votación en los barrios santiaguinos de Quilicura, Maipú y Pudahuel. Éste fue el único hecho destacado que alteró la tranquila jornada sabatina, en la que 8,28 millones de chilenos se prepararon para elegir hoy al Presidente, un puesto al que aspiran el derechista Sebastián Piñera y el oficialista Eduardo Frei.

Piñera, favorito en las encuestas, mantuvo ayer un encuentro con personas de la tercera edad y disputó un partido de fútbol. En tanto, Frei se reunió con vecinos del barrio santiaguino de La Florida, y tras ese encuentro viajó a Osorno, a 940 kilómetros al sur de Santiago, para votar hoy en la cercana localidad de La Unión, donde está inscrito.

A la par, el Gobierno chileno tildó ayer de "ofensivas" las palabras de Piñera el viernes, con las que criticó a los miembros de la Concertación de centroizquierda, en el poder desde 1990. "Les haría muy bien después de 20 años volver a vivir la vida normal y corriente que viven millones y millones de chilenos... Si no es tan malo, amigos de la Concertación, levantarse temprano, trabajar de forma honesta, ganarse la vida, sacar adelante a sus familias".

"Me parecen absolutamente ofensivas, injustificadas, y espero que él se excuse cuanto antes, porque, sin ninguna razón, ha herido a mucha gente", respondió el sábado el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, en declaraciones a la radio Biobío.

Frei va por segundo mandato

Eduardo Frei Ruiz-Tagle, que busca un segundo mandato como presidente de Chile, tiene, según los analistas, opciones de triunfo en la segunda vuelta electoral, gracias a que se ha reinventado tras su derrota del 13 de diciembre de 2009.

Aquel día, el candidato oficialista sumó un 29,6 por ciento de los votos, el peor resultado histórico de la coalición que ha gobernado Chile desde 1990, 14 puntos por debajo del derechista Sebastián Piñera (44,03), al que se enfrentará este domingo en la segunda ronda.

Una encuesta reciente hecha por la empresa Mori dio a su opositor una ventaja de 1,8 puntos, porcentaje inferior al margen de error del sondeo, lo que demuestra que Frei llega a la votación con posibilidades de ganar. Nacido en 1942, casado con Marta Larraechea, padre de cuatro hijas, ingeniero de profesión y aficionado al fútbol, tuvo un primer mandato que coincidió con el despegue económico de Chile, con tasas de crecimiento superiores al 6 por ciento, salvo en su última etapa, cuando el país fue golpeado por la crisis asiática.

Piñera es opción de derecha>

El empresario Sebastián Piñera Echenique, uno de los hombres más ricos de Chile, confía en ganar las elecciones presidenciales de este domingo convertido en el "candidato progresista" de una derecha a la que pocos reconocen en esa condición.

Piñera, que simpatizó con la Democracia Cristiana chilena cuando era joven y votó contra la continuidad del dictador Augusto Pinochet, tiene ahora la oportunidad de que la derecha conquiste el poder democráticamente por primera vez en medio siglo y está convencido de lograrlo, gracias al desgaste de la Concertación en 20 años de poder y al eslogan de campaña "Únete al cambio".

A Piñera, algunos medios lo comparan con el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, por ser dueño de un club de fútbol y un canal de televisión y haberse sometido a una cirugía estética. La encuesta de la consultora Mori reveló que la mayor parte de los votantes de Piñera defiende el régimen de Pinochet.

Piñera vs. Frei

Por tercera vez en su historia, los chilenos elegirán a su Presidente de la República en segunda vuelta.

Sebastián Piñera, candidato de la conservadora Coalición por el Cambio, figura favorito en las encuestas.

El senador democristiano Eduardo Frei, presidente entre 1994 y 2000, logró en la primera vuelta 29,6 por ciento.