El Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) de febrero -publicado ayer por el Banco Central- no trajo trajo buenas noticias. El alza de 2,7% que registró el segundo mes del año, comparado con el mismo período de 2009, estuvo muy por debajo de las expectativas del mercado que esperaban un incremento en el crecimiento económico entre un 4% y 5%.
Según el instituto emisor el resultado del mes se debió al bajo desempeño en los sectores asociados a los recursos naturales y por el efecto del terremoto del 27 de febrero en la industria, comercio, transporte y en el rubro de la electricidad, gas y agua.
La serie desestacionalizada -es decir la comparación entre febrero y enero de este año- mostró un retroceso de un 1,6%, mientras que la tendencia ciclo tuvo una expansión anualizada del 4,5%.
Una vez conocidos estos números el gobierno redobló su apuesta a que en el segundo semestre, la situación económica mejore por la puesta en marcha del plan de reconstrucción y empleo en las zonas más afectadas por la catástrofe.
"A pesar de las dificultades que enfrenta la economía en el corto plazo, estamos optimistas respecto a la segunda parte del año: vamos a tener un semestre fuerte en materia de actividad económica, y estamos justamente trabajando en los paquetes de financiamiento para que esto ocurra", expresó el ministro de Hacienda, Felipe Larraín.
Asimismo, el jefe de las finanzas públicas agregó que "las cifras de marzo, abril, y mayo serán las más complicadas para luego mostrar una recuperación fuerte, y que se verá más clara para los últimos meses de 2010, pues todos los programas de reconstrucción y de empleo comenzarán a dar su fruto", agregó.
MESES A LA BAJA
En el corto plazo, sin embargo, las cifras macroeconómicas se avizoran difíciles. Así, para algunos expertos, el próximo trimestre debería mostrar cifras negativas. Para Rodrigo Aravena, subgerente de Estudios de Banchile Inversores, "vamos a tener dos o tres meses de un crecimiento muy bajo, de hecho es muy probable que marzo sea negativo, que abril sea cercano a cero o negativo y que en mayo retomemos una senda de crecimiento mayor".
Más pesimista se muestra el economista de la Universidad de Santiago, Francisco Castañeda, quien vaticina que los efectos negativos del terremoto sobrepasarán los primeros seis meses del año. "No hay que esperar un gran repunte en el segundo semestre, yo soy de los que me inclino a pensar que este año la economía va a ir hacia abajo, estamos hablando de un 4% y no del 5% de crecimiento", sostuvo.
Para el director del Programa Económico del Instituto Libertad y Desarrollo, Ricardo Matte, establecer cifras para los próximos meses es complicado por los problemas que está teniendo la autoridad para establecer los datos de medición, sin embargo, agrega que "yo creo que van a ser en torno a cero o levemente negativo".
BANCO CENTRAL
Para los analistas las proyecciones del Central en cuanto a inflación y a tasa de interés se verán modificadas a partir del tercer trimestre donde debiese situarse entre el 1,5 y el 2%. En este contexto se conoció ayer la minuta de la última reunión del Consejo del Banco Central (del 18 de marzo), en donde se analizaron con profundidad los efectos financieros del terremoto.
Para los consejeros éstos "en principio, serían acotados, con un incremento en la inflación y una caída en el nivel de actividad en el corto plazo".
Publicado en La Nación.