Francisco Castañeda
Economista Usach

Cuando se analizan las cifras fiscales, no deja de sorprender la actitud de las actuales autoridades y algunos lobbystas respecto a que la administración anterior comprometió gran parte de los recursos fiscales para el presente año. ¿Acaso el actual gobierno no habría continuado este año con los mayores recursos para la Junji, reajustes de subsidios habitacionales y de subvenciones educacionales, y el reajuste del sector público?.
 
Algunos datos previos: Chile obtiene un upgrade de su clasificación riesgo país a "Aa3" por Moody´s (exigente clasificadora de riesgo internacional) recién en junio 2010, mejorando su anterior clasificación. Moody´s alaba la política fiscal contracíclica  heredada de los gobiernos anteriores. El comunicado y opiniones de prensa de Moody´s señalan:
"Los años de política macroeconómica sólida, incluyendo un superávit de regla fiscal estructural destinada a reforzar los ingresos y gastos del gobierno, posicionaron a Chile en buen pie para enfrentar la crisis económica global y las secuelas financieras del terremoto. Un alza del rating en este escenario particular puede ayudar más porque puede ser un recordatorio para el mercado que la situación fiscal de Chile es una de las más fuertes a nivel mundial".
 
Aunque los efectos sobre el costo financiero de emitir deuda externa serían marginales (prima por riesgo país se mantendría en niveles actuales de 1,0 %– 1,2%), la señal  de confianza es poderosa. ¿Qué trata de explicar entonces Roxana Costa, Directora de Presupuestos del Ministerio de Hacienda?, ¿estará en desacuerdo con la visión de Moody´s?, o ¿está atenuando las expectativas respecto a alcanzar un equilibrio fiscal en el corto plazo?

Publicado en Diario Financiero y Estrategia