Jorge Melgarejo Urbano

Estudiante Ingeniería Comercial USACH

La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es un concepto de moda, más allá de la filantropía las empresas están creando espacios para conectarse no sólo en el target del producto, sino también enfocando esfuerzos en la mejora de los grupos de interés desde un nivel de localidad a incluso país. Existen distintas maneras de explicarla. La asociación Business for Social Responsibility la define como "alcanzar el éxito comercial en maneras que honren los valores éticos y con respeto a las personas, las comunidades y el medio ambiente". Si bien, el concepto parece ser ampliamente aplicable, existen industrias en las que es difícil la relación con los grupos de interés. Un ejemplo es la minería donde es clave la obtención de la licencia social, es decir que se permitan las operaciones no sólo con permisos legales sino que la comunidad acepte la operación sin interrumpir por manifestaciones, bloqueo de caminos, entre otros. Dentro de esto la compañía Barrick, ampliamente criticada por ONG's ha fomentado considerablemente al desarrollo de las comunidades aledañas a sus operaciones un ejemplo es el significativo aporte en la ciudad de Vallenar, siendo un ente importante en la entrega de herramientas laborales, fuente de empleos y programas de desarrollo comunitario, así como en medio ambiente apostando a la generación eléctrica a través de energía eólica. El desafío de la RSE no es ni será sólo entregar dinero o generar programas, es la real interacción, compromisos por el desarrollo e innovación de la compañía con los grupos de interés, para obtener un desarrollo sustentable en el largo plazo.

Publicado Diario Financiero y Estrategia