Se trata de Rodrigo Caputo, Dr. en Economía de la Universidad de Cambridge y profesor de la FAE USACH, quién publicó tres investigaciones en distintas revistas internacionales abordando temas de política monetaria, tipo de cambio y crisis financiera, entre otros.
Se trata de Rodrigo Caputo, Dr. en Economía de la Universidad de Cambridge y porfesor de la FAE USACH, quién publicó tres investigaciones en distintas revistas internacionales abordando temas de política monetaria, tipo de cambio y crisis financiera, entre otros.
El Dr. en Economía de la Universidad de Cambridge, y profesor de la FAE USACH, Rodrigo Caputo, comenta en la siguiente entrevista a cerca de sus tres recientes investigaciones publicadas en diversas revistas científicas como investigador del Centre for Experimental Social Sciences (CESS) de la Universidad de Oxford y la Facultad de Administración y Economía de la Universidad de Santiago de Chile.
¿Cómo ha sido tu vinculación con el CESS Oxford University-USACH?
Ha sido muy fructífera e intensa. A fines de junio tuve la oportunidad de visitar, por algunas semanas, Nuffield College en Oxford y asistir a la escuela de verano que organizan una vez al año. De forma paralela empecé a trabajar con Raymond Duch, que es profesor en Oxford y director del CESS, en un proyecto de investigación que continua hasta el día de hoy. Este proyecto busca identificar, primero en Estados Unidos y después en un set amplio de países, los determinantes económicos, de incertidumbre y políticos que influyen en las expectativas de los consumidores.
Nuestras conclusiones preliminares apuntan a que las variables económicas tienen un rol de primer orden. Adicionalmente, vemos que los indicadores de incertidumbre, que se pensaba eran de primer orden, en verdad contribuyen bastante poco. Las variables políticas, medidas como el índice desaprobación presidencial tienen un rol importante y resultan, en todos los horizontes de tiempo, mucho más relevantes que los factores de incertidumbre. Por último, encontramos que un incremento en la incertidumbre reduce la confianza de los consumidores. Lo que es algo paradojal, sin embargo, es que bajo la administración de Trump el efecto es mucho menor. Lo que concluimos es que la "volatilidad" de este presidente es tan alta que "amortigua" aumentos de incertidumbre.
Una de tus publicaciones fue en la International Journal of Finance and Economics titulada "Now and always, the relevance of the Taylor rule in Europe" ¿De que se trata este estudio?
Este trabajo surgió de una colaboración con Agustín Díaz un colega que en la actualidad está realizando un doctorado en la Universidad de Pennsylvania. Luego de la adopción del Euro, los bancos centrales de los países miembros dejan de hacer política monetaria independiente y es el Banco Central Europeo (BCE) quien conduce la política monetaria de la zona Euro. "Now and always, the relevance of the Taylor rule in Europe", caracteriza la forma en que el BCE modifica su instrumento de política monetaria, la tasa de interés, ante cambios en el entorno macroeconómico de Europa.
¿Cuál es el principal objetivo de esta investigación?
Nuestro principal objetivo era entender los factores que determinan el accionar del Banco Central Europeo (BCE). Después de la adopción del Euro, a principios de los 2000s, es esta la entidad a cargo del diseño de la política monetaria de la región como un todo. Los bancos centrales de cada país, si bien siguen existiendo, dejan de diseñar la política monetaria de los países miembros. Ahora bien, existía la percepción en algunos economistas que el BCE respondía principalmente a los desarrollos de los países más grandes (Alemania) y menos a las condiciones de los países periféricos (Grecia). También existía la percepción que el BCE era mucho más agresivo en responder a la inflación de lo que eran los bancos centrales nacionales antes del Euro. Nuestros resultados indican que ninguna de estas hipótesis se sustenta.
¿Cuáles son las principales conclusiones de este trabajo?
Nuestro estudio concluye que el BCE responde a los desarrollos económicos de la zona como un todo. En concreto, el BCE aumenta la tasa de interés cuando a la inflación esperada de la zona Euro se incrementa o cuando el crecimiento de la actividad del conjunto de países va más allá de sus capacidades de largo plazo. Ahora bien, la forma en que se hace este tipo de política, es decir la intensidad de respuesta, no resulta estadísticamente distinto de lo que hacían en el pasado los bancos centrales de las principales economías europeas: Alemania, Francia e Italia. De esta forma concluimos que el BCE no diseña su política pensando en un país en particular y que se comporta de forma similar a lo que lo hicieron los bancos centrales nacionales en el pasado.
Otra de tus investigaciones publicadas en el International Finance se denomina "Real exchange rate appreciation after the financial crisis of 2008–2009: Misalignment or fundamental correction?" ¿Cuál es el principal objetivo de este estudio?
En las secuelas de la crisis financiera de 2008 – 2009, varias economías emergentes experimentaron apreciaciones significativas del tipo de cambio real. Desde el punto de vista de los encargados de formular políticas, entender las fuentes de estas apreciaciones es crucial para diseñar respuestas políticas eficientes.
El objetivo de este documento es doble. En primer lugar, determinamos hasta qué punto los episodios de apreciación se produjeron por cambios en los fundamentos, o si constituyen desalineamientos del tipo de cambio. En segundo lugar, evaluamos el impacto que tienen las variables no fundamentales en la dinámica del tipo de cambio real. Basándonos en un modelo de forma reducido, concluimos que los episodios de apreciación, a raíz de la crisis financiera de 2009, pueden explicarse por dos elementos: una mejoría en los fundamentos y una corrección de desalineamientos pasados.
Por lo tanto, la apreciación real observada desde 2010 fue determinada, sobre todo, por elementos fundamentales. En cuanto a las implicaciones políticas, nuestros resultados sugieren que las apreciaciones en ese período deberían haber sido toleradas por los responsables de la formulación de políticas.
En relación a "Wicksellian rules and the Taylor principle: some practical Implications", pronto a publicar por Scandinavian Journal of Economics, ¿Cómo podríamos resumir este trabajo de indagación?
En este artículo se derivan y comparan reglas monetarias que responden al nivel precios (denominadas reglas Wicksellianas) y reglas de Taylor en un modelo nuevo-keynesiano estándar. Concluimos que las reglas Wicksellianas no requieren el principio de Taylor para generar determinación. Nuestros resultados tienen dos implicancias. En primer lugar, en un entorno de estimaciones uniecuacionales, la estimación de las reglas simples de Taylor- cuando la verdadera regla es Wickselliana- puede llevar a concluir erróneamente que el equilibrio es indeterminado.
En segundo lugar, las áreas de determinación son mucho más amplias en reglas Wickesellianas. De esta forma este tipo de reglas genera beneficios a las autoridades monetarias en la medida que evita que la economía entre en una espiral inflacionaria, aun cuando la respuesta de política a los precios sea tenue.