Camila Mateluna, Juan Castillo y David Aguilera, egresados destacados de Contador Público y Auditor realizan sus estudios de doctorado en el extranjero, Reino Unido, Estados Unidos y España respectivamente.

 “Exponerse a una realidad cultural distinta es siempre relevante y enriquecedora tanto personal como profesionalmente”

Desde el Reino Unido la académica Camila Mateluna, cuenta que está realizando su Doctorado en la Universidad de Sheffield. Recuerda que su llegada al principio fue caótica, aparte del viaje y las maletas para una estadía de al menos cuatro años, tuvo que enfrentarse con dificultades para encontrar un lugar donde vivir, en una ciudad que no conocía bien y donde tuvo que procesar una gran cantidad de información por el tema de la visa y el proceso de inducción a la universidad.  También señala que el idioma fue un problema al comienzo, ya que el acento entre las personas locales es bastante diferente al inglés que ella había podido aprender, pero a pesar de todo, conoció a una comunidad chilena que le hizo mucho más fácil este proceso.

Con respecto a su experiencia ésta ha sido muy enriquecedora y desafiante, “he aprendido mucho de las actividades de formación, como también con la experiencia trabajando en mi tesis y en otras actividades como presentaciones, conferencias y proyectos colaborativos.  Desarrollar una tesis requiere mayoritariamente un trabajo autónomo, saber autogestionar el tiempo con las tareas que se realizan y es más bien solitario” señala.

Dice que la pandemia le ha afectado mucho, ya que emocionalmente estar lejos de la familia en Chile, con la preocupación de las malas noticias que llegaban, claramente le impactó en muchos aspectos.  “El trabajar desde casa y no compartir la misma experiencia con otros, también fue algo negativo para la motivación”.  Sin embargo, el manejo de la pandemia en Reino Unido fue mucho menos restrictivo que en Chile, eso le permitió realizar actividades que fueron importantes para su salud mental. 

A pesar de todo, ella recomienda estudiar en el extranjero, “considero que exponerse a una realidad cultural distinta es siempre relevante y enriquecedora tanto personal como profesionalmente.  Para mí ha sido un aprendizaje constante, que me ha enseñado mucho más allá de lo puramente académico y profesional y estoy segura que lo aprendido me permitirá ejercer de mejor manera la docencia y por su puesto poder desarrollarme como investigadora”.

“Estudiar un Ph.D. puede llegar a ser una experiencia muy demandante en varios aspectos de nuestras vidas y, por consiguiente, requiere de un compromiso muy grande y de largo plazo”  

Para el académico Juan Castillo quien realiza sus estudios de Doctorado en la Universidad de Maryland en EEUU, no le costó adaptarse fuera, dice que la ciudad de College Park es un lugar muy agradable para vivir, con muchas áreas verdes, espacioso y muy limpio.

 Comenta que “La Universidad de Maryland es muy linda y acogedora, con una vibrante vida académica y un cuerpo docente que están muy comprometidos con el buen desarrollo de sus estudiantes”.

Con lo que respecta a su experiencia, así como la de sus colegas   ésta ha sido desafiante.  Considera que es un ambiente de alto rigor académico y con alta intensidad en actividades, cursos y desarrollo de habilidades para el futuro.  “Hay muchas piezas que componen el puzzle de nuestra formación como investigadores que deben ponerse en su lugar a medida que va pasando el tiempo en el programa, como por ejemplo la formación en investigación contable, métodos econométricos, resiliencia y perseverancia, entre otros”. 

En su experiencia personal, considera que ha sido una etapa muy enriquecedora, pero igualmente muy demandante tanto en lo académico como en lo emocional. La pandemia ha sido una situación difícil, pues las interacciones en persona cesaron casi por completo como un año y medio. 

Señala que “estudiar un Ph.D. puede llegar a ser una experiencia muy demandante en varios aspectos de nuestras vidas y por consiguiente, requiere de un compromiso muy grande y de largo plazo”.  

 "Entender el mundo desde otra perspectiva y compartir con personas de otras naciones es un requisito mínimo para poder tener una visión holística de la sociedad y enfrentar los desafíos actuales y de futuro”. 

Desde España el profesor David Aguilera quien realiza su Doctorado en la Universidad de Valencia, cuenta que llegó un 27 de enero a una ciudad muy amigable y pequeña con un clima bastante agradable.  No tuvo problemas en adaptarse, ya que la cultura española es similar a la chilena y el idioma facilitó mucho las cosas.

“Mi primer shock cultural fue encontrarme con los supermercados cerrados los días domingos, sin embargo, lo bueno que los pequeños almacenes y minimarkets que son atendidos por sus dueños, permanecen abiertos”, comenta.

Confiesa que su experiencia fue bastante extraña, ya que al mes de llegar y ad portas de la fiesta de Fallas de Valencia se declaró la pandemia y a partir de ese momento tuvo que terminar las actividades por medio telemático. Además, dice que tuvo que mudarse en plena crisis, ya que terminaba su contrato de arriendo donde se alojaba.  

En cuanto la pandemia, dice que ha sido un problema para el desarrollo normal de actividades. “Los espacios de discusión se vieron disminuidos, en un momento en el que se requiere mucha reflexión y eso perjudica profundamente los avances, pero alcancé a compartir actividades con mis compañeros del programa, eso me ayudó a conversar con personas que estaban en la misma situación”.  

Con respecto a su experiencia, el académico considera que la formación en el extranjero es una necesidad. “La globalización es un fenómeno que no sólo aplica para los discursos, sino que es algo que impacta en cualquier tipo de actividad. Entender el mundo desde otra perspectiva y compartir con personas de otras naciones es un requisito mínimo para poder tener una visión holística de la sociedad y enfrentar los desafíos actuales y de futuro”. 

Fuente: Vinculación con el Medio DCYA